La motivación de las personas que trabajan en nuestros equipos es una de las preocupaciones más extendidas entre los managers actuales. Muchas son las ocasiones en que un manager, ante la pregunta sobre qué es lo que le preocupa o qué le parece más difícil de su rol como gestor de un equipo de personas, la contestación es cómo motivarlos.

¿Es tan difícil motivarnos?

Sin duda, la respuesta es un categórico sí. Motivar a nuestros colaboradores es una de las labores más difíciles que tenemos. Y es que no solo depende de las acciones que nosotros realizamos, sino también de la elección personal que cada uno de ellos hace(automotivación). Por lo tanto, si la motivación es tan difícil de gestionar, ¿qué podemos hacer?

La motivación también depende de la elección personal que cada uno hace

En este momento, es bueno plantearse otra pregunta:

Cuando no están motivados, ¿cómo están?

Y la respuesta suele ser: cabreados, enfadados, irritados, disgustados, enojados, rebotados, mosqueados o cualquier otro sinónimo que exprese este mismo sentimiento o emoción predominante. Ante la argumentación de que «cuando la gente no está motivada, suele estar cabreada-enfadada», la reflexión que te planteo es: y tú, como manager, ¿puedes hacer algo para no cabrearlos? Por supuesto que sí. Por eso, si me permites la ironía, la mejor recomendación ante esta preocupación por la motivación es que empieces por intentar no enfadarlos, que es algo que claramente está en tu mano, y ya estarás avanzando en favor de la motivación de tu equipo.

Mantener la motivación de nuestros colaboradores siguiendo la técnica de «no enfadarlos», no se basa en la realización de una acción puntual, sino más bien de una táctica. Si utilizamos el símil de las carreras, no se trataría de una prueba de velocidad, sino de una de resistencia y constancia, tipo maratón. Se centra en analizar todas las interacciones que tenemos con ellos y, aplicando grandes dosis de racionalidad, evitar o modificar aquellas que puedan enfadarlos y, por lo tanto, desmotivarlos.

¿Qué esperan de nosotros como managers? ¿Lo haces?
Y ¿qué, si no consiguen, puede llevarles a estar disgustados? ¿Lo evitas?